El exministro de deportes de Kenia ha sido acusado de abuso de poder e incumplimiento de sus funciones por malversación de fondos destinados a deportistas que compitieron en los Juegos Olímpicos de Río 2016
Hassan Wario rinde cuentas a la justicia. El exministro de deportes de Kenia ha sido acusado de abuso de poder e incumplimiento de sus funciones por malversación de fondos destinados a deportistas que compitieron en los Juegos Olímpicos de Río 2016. El asunto ha empañado la actuación más exitosa del país africano en una cita olímpica; logró seis medallas de oro. Wario, ahora embajador de Kenia en Austria, negó los hechos ante un magistrado en Nairobi antes de quedar en libertad bajo fianza de 1 millón de chelines kenianos, en torno a 8.600 euros. El presidente del país, Uhuru Kenyatta, aumenta la presión sobre los corruptos para tratar de reprimir el robo generalizado. El juicio tendrá lugar el próximo mes de noviembre.