El presidente de EEUU respondía llamadas de niños deseoso de conocer la ubicación del trineo de Papá Noel en Nochebuena. Habló con Coleman, de siete años, al que le dijo que a esa edad creer en Papá Noel es algo marginal.
Junto a su esposa Melania, Donald Trump contestaba este lunes algunas de las llamadas de niños que querían saber dónde se encontraba exactamente el trineo de Papá Noel y sus regalos.
Coleman fue uno de los afortunados en hablar con el presidente.
"Pásalo muy bien", se oye decir a Trump. "¿Aún crees en Papá Noel? ¿Porque a los siete años es algo marginal, no?
Coleman había llamado, como muchos otros niños, al Comando de Defensa Aeroespacial de Nortearmérica, NORAD, que sigue el recorrido de Papá Noel y los renos en Nochebuena.
Tradicionalmente, la pareja presidencial responde a algunas de estas llamadas, tarea que le encanta a Melania, según cuenta en un tuit.
La costumbre comenzó en 1955, cuando un coronel corrió a contestar el teléfono rojo, esperando hablar con el presidente. Pero se encontró al otro lado de la línea a una niña que le preguntó si realmente era Papá Noel. El militar optó por seguirle el juego.