El Alto Comisionado para los Derechos Humanos ha pedido el fin de la represión contra los manifestantes que protestan desde el lunes contra la gran subida del precio del combustible. Según ONG locales al menos 16 personas han muerto y decenas han resultado heridas. Otras 600 han sido detenidas.
Naciones Unidas condena la represión contra los manifestantes en Zimbabue y pide al Gobierno que dialogue y atienda sus quejas.
Esta semana, al menos 16 personas habrían muerto según ONG locales y decenas han resultado heridas por las fuerzas del orden durante las protestas que han tenido lugar en todo el país contra la subida del precio del combustible.
Según el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, se han denunciado múltiples casos de intimidación en forma de registros de viviendas, ataques físicos y la detención de más de 600 personas, entre ellos activistas y líderes de la oposición.
El pasado sábado el ejecutivo de Emmerson Mnangagwa anunció la duplicación del precio del combustible en un país que sufre una profunda crisis económica. El principal sindicato convocó entonces una huelga general.