Boeing admite sus errores. Dennis Muilenburg, máximo ejecutivo de la compañia estadounidense ha reconocido la similitud entre los fallos técnicos que afectaron a los aviones 737 MAX, accidentados en Etiopía e Indonesia, y el "alto volumen de trabajo" al que se pueden enfrentar sus pilotos.
Boeing admite sus errores. Dennis Muilenburg, máximo ejecutivo de la compañia estadounidense ha reconocido la similitud entre los fallos técnicos que afectaron a los aviones 737 MAX, accidentados en Etiopía e Indonesia, y el "alto volumen de trabajo" al que se pueden enfrentar sus pilotos. El constructor aeronáutico tomará medidas para evitar nuevas catástrofes.
"Parece que, en ambos vuelos, el sistema de control conocido como MCAS se activó en respuesta a una información 'errónea' del ángulo de ataque. Como nos han dicho los pilotos, una activación errónea de la función del MCAS puede sumarse a un entorno que ya de por sí supone una alta carga de trabajo. Es nuestra responsabilidad eliminar este riesgo y lo asumimos. Sabemos cómo hacerlo", declara Dennis Muilenburg.
El ejecutivo considera que la mejora del sistema informático, un entrenamiento asociado a él y un manual de instrucciones adicional, que los pilotos han solicitado, "eliminarán la posibilidad de que una activación no intencionada del MCAS y evitarán trágicos accidentes como los que han ocurrido.