Aún no está disponible un control de daños completo, ni siquiera está garantizada la solidez de alguno de los muros.
La pregunta continúa ante las cenizas del interior de la catedral parisina. ¿Cuántas han sido las pérdidas?
No hay cubierta ni techumbre, todo el armazón ha desaparecido.
Las dos torres emblemáticas están en pie, pero queda pendiente evaluar la solidez de todo el conjunto.
El gallo relicario de la parte superior de la flecha se derritió. Estaba previsto que fuera bajado a tierra en junio para su restauración.
Aún no está disponible un control de daños completo.
La mayor parte de las vidrieras han desaparecido. Queda el magnífico rosetón de la fachada principal y las vidrieras que lo acompañan, subrayándolo en horizontal.
Un equipo de bomberos y policías formó una cadena para salvar objetos que ahora están depositados en dependencias municipales.
La alcaldesa de París, Anne Hidalgo, dio la buena noticia del rescate de la corona de espinas en oro y la túnica que la tradición cristiana atribuye a San Luis.
El jueves de la semana pasada acabaron de desmontarse las doce estatuas monumentales que adornaban Notre Dame. Las imágenes de cobre junto a la de los doce apóstoles y los cuatro evangelistas se han salvado del incendio. Están ahora en restauración en Perigueux.