Trump llega a Londres. El presidente estadounidense ha bajado del Aire Force One acompañado por su esposa Melania para una polémica visita de Estado que durará tres días y en la que reunirá con la reina Isabel II y la primera ministra Theresa May
Donald Trump desembarca en el Reino Unido. El presidente estadounidense llegó este lunes por la mañana en Londres para una visita de Estado de tres días.
El Air Force One aterrizó en el aeropuerto de Stansted, donde Trump y su esposa Melania fueron saludados al pie de la escalerilla por el ministro británico de Exteriores, Jeremy Hunt.
Desde el aeropuerto, el presidente abordó un helicóptero de la fuerza aérea de EE.UU. para llevarlo hasta Winfield House, la residencia del embajador estadounidense en Regent's Park.
El mandatario va a ser recibido este mediodía por la reina Isabel II de Inglaterra en el palacio de Buckingham con toda la pompa que rodea la visita. Esta noche tendrá lugar allí un banquete de Estado en el que tanto Trump como la reina pronunciarán discursos.
Esta tarde también está previsto que el presidente y su esposa tomen el té con el príncipe Carlos, heredero de la corona, y su esposa Camilla en la residencia de Clarence House.
Mañana será el día más político. Trump se reunirá en el 10 de Downing Street con la primera ministra Theresa May, pese a que esta ya está a punto de dejar el cargo.
Trump expresa su apoyo a Boris Johnson y a un Brexit sin acuerdo justo antes de la visita
Trump llega como de costumbre precedido por la polémica, entre otras cosas, por romper la tradición diplomática de no interferir en los asuntos internos de un país al pronunciarse este fin de semana sobre el Brexit y la próxima elección del nuevo líder del Partido Conservador y primer ministro británico.
En una entrevista con el dominical "The Sunday Times", Trump señaló que el Reino Unido debería estar preparado para salir de la Unión Europea (UE) sin acuerdo e incorporar al político antieuropeo y antiinmigración Nigel Farage en las negociaciones del Brexit.
Además, Trump manifestó abiertamente su apoyo al exministro de Exteriores Boris Johnson como nuevo líder conservador al afirmar que sería un "excelente" primer ministro británico.