Fue el 23 de julio de 2018, en la región de Ática, al este del país.
PUBLICIDADLos griegos aún recuerdan la tragedia. El 23 de julio de 2018 la región de Atica en el este del país vivía el peor incendio de su historia. En él murieron 102 personas. De madrugada, las llamas comenzaron a propagarse en la localidad costera de Kineta. Horas más tarde, se originaba otro fuego en el norte de Atenas, cerca de la ciudad de Penteli. Debido a la fuerza del viento, de 120 kilómetros por hora, las llamas se propagaron rápidamente y comenzaron a quemar áreas habitadas, incluyendo el pueblode Mati.
"En algún momento, durante nuestra observación, vimos salir humo de la ciudad de Penteli. Al principio se desconocía su origen, por supuesto, porque hay colinas frente a él. Nosotros fuimos los que llamamos a los bomberos", explica este miembro de los servicios de urgencia.
Los habitantes no tuvieron apenas tiempo de reaccionar. Muchos salieron hacia el mar y otros quedaron colapsados en la carretera. El pueblo de Mati, en el que vivían 200 personas fue completamente evacuado, quedando reducido a cenizas. Los barcos también recuperaron cadáveres del agua y rescataron a cientos de personas de las playas y del mar.
"Daba igual donde fuera, el fuego estaba justo detrás de mí. No pude evitarlo. Estaba montando en bicicleta y era como si me persiguiera el fuego".
"La gente tenía miedo, se oían gritos... Las llamas llegaban incluso hasta el mar", describe María, residente en Mati.
En mayo de 2019 se contabilizaron 102 personas fallecidas, entre los cuales se encontraban 11 niños. La mayoría de las víctimas eran griegas pero tambien perdieron la vida polacos, irlandeses, belgas y georgianos. Un total de 200 personas fueron hospitalizadas y 700 hospitalizadas.
En Mati, los rescatistas encontraron a la mañana siguiente a 26 de esas personas fallecidas atrapadas cerca del mar aparentemente abrazándose unos a otros mientras morían.
Petros Fragos fue testigo de la tragedia. "El fuego viene hacia ellos desde el oeste. Como encuentran las dos puertas abiertas, atraviesan esta puerta y, junto con los propietarios, corren y descienden por la ladera de la playa, bajando unas escaleras. El segundo equipo, retrasado tres o cuatro minutos, entra por desgracia por esta puerta. Pero se encuentran con las llamas. Entran en la parcela pero estos tres minutos de diferencia resultan fatales. Una llamarada se dirige hacia ellos a través del arroyo seco, y los atrapa dentro de la finca. Se quemaron vivos".
El Gobierno de Alexis Tsipras, en el poder en el momento del desastre, no actúo con rapidez por lo que recibieron fuertes críticas. El pasado marzo, los fiscales griegos presentaron cargos contra 20 personas, entre ellas un gobernador regional y dos alcaldes locales, por el incendio forestal. Se les acusa de homicidio involuntario y negligencia.