El primer ministro de Italia considera que no hay pruebas que vinculen a miembros del Gobierno con el escándalo por la financiación rusa de la Liga Norte.
PUBLICIDADEl primer ministro italiano da la cara por Mateo Salvini tras el escándalo del Rusiagate. Giuseppe Conte ha hablado en el Senado sobre la supuesta financiación de la Liga Norte gracias a la ayuda de Moscú. "Ahora no hay elementos para socavar la confianza en los miembros del Gobierno", ha dicho Conte.
Mateo Salvini, vicepresidente y responsable de Interior, no ha dado su versión ya que considera que los hechos divulgados por diferentes medios y que están siendo investigados por la Fiscalía de Milán son "ciencia ficción". La ausencia de los miembros de su socio de Gobierno ha sido afeada por el senador centrista y ex presidente de la Cámara de Diputadso, PIer Ferdinando Casini, quien ha considerado que la ausencia de representantes del Movimiento Cinco Estrellas "un hecho político de primera magnitud".
El escándalo, que amenaza al Ejecutivo de coalición, está basado en informaciones y grabaciones en las que, por ejemplo, se escucha a un íntimo colaborador de Salvini sin cargo en el Gobierno, Gianluca Savioni hablar con funcionarios del Kremlin. Gracias a esos contactos, habría conseguido fondos para que la Liga Norte lograra la victoria en las pasadas elecciones europeas. Salvini, por delante en todas las encuestas y con alto índice de popularidad, podría plantearse una convocatoria electoral.