Ya ha comenzado la sustitución de las concertinas de la valla de Melilla por "elementos más seguros y menos cruentos"
La inmigración ilegal ha copado las conversaciones de Marruecos y España.
El Presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, recibió al Ministro de Exteriores de Marruecos Nasser Bourita. Ambos repasaron los principales temas comerciales entre ambos países y se centraron en la cooperación para reducir la inmigración ilegal.
La lucha contra las redes de tráfico de seres humanos es una prioridad de ambos países.
El Consejo de Ministros español aprobó el pasado mes de agosto una ayuda de 32,3 millones de euros para el control de la inmigración irregular.
La situación ha mejorado, pero aún no es suficiente. Según datos de la Comisión Europea, España registró desde el pasado enero hasta octubre 23.600 llegadas de inmigrantes, un 47 % menos que en el mismo periodo del año anterior.
Uno de los aspectos más controvertidos de la política migratoria en España es el uso de concertinas en la valla de Melilla. Tras numerosas promesas para hacerlas desaparecer, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ya ha puesto en marcha su sustitución por "elementos más seguros y menos cruentos" que estará terminada antes de que termine el año.