Boy Scouts of America se declara en quiebra para poder hacer frente a las demandas por abuso sexual

Los escándalos sexuales llevan a la bancarrota a Boy Scouts of America. La emblemática institución estadounidense se declaró este martes en quiebra con la intención de aferrarse a un plan de compensación para las víctimas de abusos sexuales dentro de la organización. Con esta decisión, BSA pretende poder continuar operando tras 110 años de historia seriamente manchados a partir de 2012, cuando se destapó el escándalo.
La organización hace frente actualmente a cientos de demandas por abuso sexual. Con su declaración de quiebra, quedan suspendidos todos los litigios civiles contra la institución, que afectan a miles de presuntas víctimas de abusos. Las demandas pendientes deberán ahora ser presentadas ahora ante el tribunal de bancarrota. BSA asegura que cuenta con un pasivo de entre 100 y 500 millones de dólares, mientras que sus activos no llegan a los 50.000.
Según medios estadounidenses, cerca de 12.000 jóvenes entre cinco y 21 años habrían sido víctimas de abusos sexuales a manos de 7800 monitores y líderes.
Pero solo en Estados Unidos. En Francia, el exsacerdote católico Bernard Preynat está a la espera de sentencia tras admitir que abusó sistemáticamente de decenas de menores durante más de 20 años mientras era capellán de los boy scouts en Sainte-Foy-Lès-Lyon. Recientemente, el antiguo arzobispo de la ciudad francesa, el cardenal Barbarin, quedaba absuelto de no haber denunciado los delitos cometidos por el sacerdote de su diócesis.