Viernes santo a puerta cerrada. Los cristianos de todo el mundo asumen como "prueba de fe" el aislamiento por el coronavirus. El papa se refirió a ello en su última misa. Francisco presentó la necesidad de cerrar igleias y no celebrar procesiones como "un acto de generosidad".
Los cristianos de todo el mundo asumen como "_prueba de fe"_el aislamiento por el coronavirus. El papa se refirió a ello en su última misa. Francisco presentó la necesidad de cerrar iglesiasy no celebrar procesiones como un acto de generosidad con los otros para superar juntos lo que nos afecta a todos.
Casi un año después del incendio que devastó Notre-Dame de Paris, "la vida sigue ahí", aseguró el arzobispo de París Michel Aupetit durante un "tiempo de meditación" organizado con motivo del Viernes Santo en una catedral sin fieles.".
En el pueblo aragonés de Calanda, los vecinos no se resignan al silencio en viernes santo. Como todos los años han roto la hora al mediodía de este viernes con un estruendo de bombos y tambores desde los balcones. La plaza estará vacía.
En alemania, dentro del coche , este Viernes Santo, los fieles se congregaron para una misa en un cine al aire libre de Dusseldorf, quebrando el confinamiento en casa.
La canciller Angela Merkel instó a los alemanes a seguir respetando las restricciones a la vida pública durante la Pascua para frenar la propagación del coronavirus.
Alemania ha cerrado escuelas, bares, la mayoría de las tiendas y otras instalaciones, y también ha prohibido las reuniones de más de dos personas en público.