Los libaneses no abandonarán las calles hasta que el Gobierno dimita. Esta ha sido una promesa que ha sumido al país en violentas protestas desde la semana pasada, después de la explosión de casi 3.000 toneladas de nitrato de amonio en el puerto de Beirut
PUBLICIDADLos libaneses no abandonarán las calles hasta que el Gobierno dimita. Esta ha sido una promesa que ha sumido al país en violentas protestas desde la semana pasada después de la explosión en el puerto.
Este domingo hubo fuertes enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y miles de manifestantes que dejaron al menos 60 heridos.
La escalada de violencia debido al hartazgo social, ha provocado la renuncia de los ministros de Información y Medio Ambiente. Solo días después de que un grupo de diputados también presentara su dimisión.
La ministra libanesa de Información, Manal Abdel Samad, dimitió este domingo al considerar que sigue habiendo "resistencia" a aceptar los cambios que exige la población tras la tragedia, que ha dejado de momento 158 muertos y unos 6.000 heridos.
"Después del horror del desastre de Beirut, presento mi dimisión del Gobierno", anunció Abdel Samad en un comunicado, según la Agencia Nacional de Noticias (ANN) libanesa, seguida pocas horas después por el titular de Medio Ambiente, Damianos Kattar.
Una ayuda con condiciones
La destrucción parcial de Beirut debido a la explosión de casi 3.000 toneladas de nitrato de amonio, ha movilizado a la comunidad internacional que otorgará una ayuda de 250 millones de euros en una primera parte.
Pero su entrega viene con ciertas condiciones: las autoridades libanesas deben comprometerse a realizar las reformas políticas y económicas que piden los libaneses. Entre ellas una posible transición política.
"Este ofrecimiento de ayuda incluye igualmente un apoyo a una investigación imparcial, creíble e independiente sobre las causas de la catástrofe. Es una petición fuerte y legítima del pueblo libanés. Es una cuestión de confianza. Los medios están disponibles y deben ser movilizados", dijo el presidente francés Emmanuel Macron.
Se descarta encontrar más supervivientes entre los escombros
Por su parte, el Ejército libanés dio hoy por concluida la primera fase de las labores de búsqueda y rescate, sin que los equipos locales e internacionales hayan hallado supervivientes, lo cual será menos probable a partir de este momento.
El jefe del batallón de ingeniería del Ejército libanés, Rojeh Khoury, explicó que después de tres días de búsqueda "la esperanza de encontrar a personas con vida ha disminuido", pero que continúan los trabajos para recuperar los cadáveres de debajo de los escombros.
Entre ellos, se encuentra el contingente español de operaciones GERCCMA método Arcón, que se unió este sábado a las labores de salvamento y no ha podido rescatar a ninguna persona con vida hasta el momento.