Por Chen Lin y Tom Westbrook
SINGAPUR, 14 may (Reuters) - Singapur anunció el viernes las restricciones más estrictas a las reuniones sociales y las actividades públicas desde que se levantó el confinamiento inicial por COVID-19 el año pasado, ante un aumento de las infecciones adquiridas internamente y con la aparición de nuevos focos de coronavirus en las últimas semanas.
Las nuevas medidas anunciadas por el Ministerio de Sanidad, que estarán en vigor desde el domingo hasta mediados de junio, incluyen la limitación de las reuniones sociales a dos personas y el cese de las comidas en los restaurantes
Las nuevas medidas, que han echado por tierra las esperanzas de reapertura de Singapur, han llevado al índice Straits Times y a la cotización de Singapore Airlines a su nivel más bajo en más de dos meses.
"Las esperanzas de una rápida reapertura se han desvanecido, especialmente para los sectores de viajes y ocio", dijo el analista del Banco de Singapur Moh Siong Sim. "El sector manufacturero debería aguantar, como ha sucedido el año pasado"
El teletrabajo también se convertirá en el régimen por defecto con las nuevas medidas.
Aunque con una capacidad reducida, los centros comerciales y los cines podrán seguir funcionando, y los eventos y las bodas podrán celebrarse con nuevas normas.
Las autoridades afirmaron que revisarán las medidas al cabo de dos semanas para evaluar si son necesarios ajustes
La ciudad-estado asiática, un importante centro comercial y financiero, llevaba meses registrando casi cero o menos de diez infecciones internas diarias, pero los casos han aumentado recientemente. El jueves se confirmaron 24 casos de COVID-19 de transmisión local, el mayor número diario desde mediados de septiembre, debido en parte a un foco en el aeropuerto de Changi.
La bolsa de Singapur bajaba cerca de un 3%, con retrocesos destacados de las acciones expuestas al comercio minorista y a los viajes. Las acciones de Singapore Airlines caían más de un 6%.
(Reporte de Chen Lin y Tom Westbrook; edición de Ed Davies, traducido por Tomás Cobos)