La Iglesia uruguaya de Cristo Obrero y Nuestra Señora de Lourdes declarada Patrimonio Mundial. La obra, del ingeniero Eladio Dieste, marcó un hito en la historia arquitectónica del siglo XX
Llama la atención por su original diseño, por sus formas onduladas y sus ladrillos, utilizados de una manera tan particular que transforman la construcción en una obra de arte. Es la Iglesia uruguaya de Cristo Obrero y Nuestra Señora de Lourdes, del ingeniero Eladio Dieste, que la Unesco acaba de incluir en su lista de Patrimonio Mundial.
Se encuentra en la localidad de Atlántida, a 50 kilómetros de Montevideo y, según los expertos, su construcción entre 1958 y 1960, marcó un hito en la historia arquitectónica del siglo XX.
El Comité del Patrimonio Mundial ha destacado su valor excepcional como ejemplo emblemático del uso de una nueva técnica constructiva, la cerámica armada, que Dieste desarrolló a partir de una tradición milenaria.
Este es el tercer sitio de Uruguay que entre en la lista de Patrimonio de la Unesco, después del Barrio Histórico de la ciudad de Colonia y el Paisaje Industria de Fray Bentos.