Alrededor de 2.000 migrantes que soportaban temperaturas gélidas en la frontera de Bielorrusia con Polonia pasaron la noche en un centro logístico
El campamento improvisado en la frontera polaca se ha vaciado por completo. Alrededor de 2.000 migrantes que soportaban temperaturas gélidas en la frontera de Bielorrusia con Polonia pasaron la noche en un centro logístico después de que su campamento fuera desalojado por la guardia de fronteras.
Sin embargo, los intentos de cruzar ilegalmente a territorio de la Unión Europea continúan y se han vuelto más agresivos. El jueves, medio centenar de personas atravesaron la valla hacia Polonia. Dos grandes grupos de unos 500 migrantes lo intentaron el viernes, pero fueron expulsados.
Desde principios de año se han registrado más de 34.000 intentos de cruzar ilegalmente la frontera poclaco-bielorrusa en una crisis que, según Occidente, Minsk ha ideado como represalia por las sanciones impuestas a su régimen.
Cientos de iraquíes volaron de vuelta a casa el jueves desde Bielorrusia tras abandonar sus esperanzas de llegar a la UE. Pero otros miles permanecen bajo cubierto en un almacén cerca de la frontera.