Por Ana Buil Demur
con AP
El ayuntamiento y el palacio presidencial han sido testigos y víctimas de estos días de violencia.
Las heridas son visibles en Almaty, la ciudad más grande de Kazajistán, tras los peores disturbios desde su independencia hace 30 años. El ayuntamiento y el palacio presidencial han sido testigos y víctimas de estos día de violencia. Las autoridades kazajas aseguran que la situación en el país se ha "estabilizado y está bajo control".