Rusia acusa a Occidente de urdir un complot informativo para preparar "sus propias provocaciones a gran escala, incluidas las de carácter militar". El jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, se reúne en Berlín con sus homólogos francés, alemán y británico
Antony Blinken continúa su gira europea para coordinar la respuesta de Occidente a la crisis en la frontera ruso-ucraniana. El jefe de la diplomacia estadounidense se reunió este jueves en Berlín con los ministros de Exteriores de Alemania, Francia y Reino Unido. Horas antes, el presidente estadounidense, Joe Biden, advirtió que "será un desastre para Rusia" si finalmente decide invadir Ucrania.
Moscú culpa a las potencias occidentales y a los medios de comunicación ucranianos de publicar especulaciones sobre una inminente invasión rusa para encubrir sus propia intenciones. Escuchamos a la portavoz del ministerio ruso de Exteriores.
"Estamos convencidos de que el objetivo de esta campaña es crear una cobertura informativa para preparar sus propias provocaciones a gran escala, incluidas las de carácter militar, que pueden tener las consecuencias más trágicas para la seguridad regional y mundial", aseguró Maria Zakharova, portavoz del Ministerio de Exteriores ruso.
Sobre el terreno, la situación sigue siendo muy tensa. Imágenes por satélite muestran el impresionante despliegue militar ruso en varios puntos estratégicos cerca de la frontera ucraniana. Según Occidente, hay desplegados unos 100 000 soldados rusos.
Muchos habitantes del este de Ucrania temen un nuevo conflicto. Los combates sacuden la región desde 2014, cuando Rusia se anexionó Crimea y los separatistas, apoyados por Moscú, lanzaron insurrecciones en las regiones de Donetsk y Lugansk.