DUBLÍN, 31 ene -Ryanair exigió el lunes a las autoridades bielorrusas que le garanticen que no se repetirá el desvío de su vuelo el pasado mes de mayo y dijo que las líneas aéreas no deberían sobrevolar el país hasta que esto ocurra.
El avión sobrevolaba Bielorrusia en su trayecto de Atenas a Vilna cuando los controladores bielorrusos le ordenaron aterrizar en Minsk, alegando una amenaza de bomba. Una vez en tierra, un periodista disidente con el Gobierno bielorruso a bordo del avión fue detenido junto con su acompañante.
Las potencias occidentales respondieron con una oleada de nuevas sanciones y Estados Unidos acusó este mes a cuatro oficiales bielorrusos de piratería aérea.
Un informe de las Naciones Unidas publicado el 17 de enero concluyó que la amenaza de bomba denunciada había sido inventada, sin identificar la fuente del engaño. El informe afirmaba que Bielorrusia había ocultado información crucial al equipo de investigación de la ONU.
El jefe del grupo Ryanair, Michael O'Leary, dijo que la compañía aérea apoya la acción de Estados Unidos. Acogió con satisfacción el informe de la ONU, aunque dijo que "podría haber ido más lejos".
"Creo que es fundamental para el futuro de los viajes aéreos que no se repita lo que, en mi opinión, fue el primer caso desde el Convenio de Chicago de 1945 de un acto de piratería internacional patrocinado por un Estado", declaró O'Leary, en una convocatoria de inversores.
"No habrá vuelos sobre Bielorrusia a menos que se obtengan las garantías adecuadas de que esto no se repetirá", dijo.
Bielorrusia ha dicho que actuó legalmente y de acuerdo con todas las normas internacionales, y acusó a las potencias occidentales de utilizar el episodio para intentar socavar el poder del presidente Alexander Lukashenko.
La Organización de Aviación Civil Internacional de las Naciones Unidas debe estudiar cualquier otra medida en una reunión de su Consejo de 36 miembros que se celebra el lunes.