Crónica desde Kiev | La reportera de Euronews Valérie Gauriat informa desde un refugio en la capital ucraniana, totalmente vacío pese a que sonaron las sirenas. La población parece haberse acostumbrado a que suenen y nadie bajó, salvo ella.
La crónica de Valerie Gauriat, en Kiev el domingo 27 de febrero de 2022 por la noche
"Las sirenas acaban de sonar, así que como es debido, voy al refugio.
Bueno, no hay nadie aquí, obviamente la alerta no preocupó a nadie. En el hotel en el que me hospedo, donde se hospedan los periodistas, todo el personal me ha dicho que si tuvieran que bajar al refugio cada vez que hubiera una alerta, estarían todo el tiempo aquí y tienen trabajo.
Así que ya no se molestan a menos que ocurra algo realmente serio y hasta ahora no pasó. Hablé con dos jóvenes que trabajan en la recepción. Uno de ellos de 18 años, dijo que no creía realmente que las tropas rusas acaben invadiendo la capital ucraniana, pero que si ocurriera, dijo, estaría dispuesto a tomar las armas. No querría tener que matar a nadie -me dijo- ni tenía pinta de fuera a matar a nadie. Pero defendería a sus tropas si fuera necesario.
Y de hecho, dijo que toda la población haría lo mismo. Y hace unos días, el Gobierno distribuyó armas a los civiles, y la operación tuvo tanto éxito que ya no quedan armas que repartir.
El hecho de que este refugio esté vacío esta noche es una buena señal. Las cosas han estado tranquilas este domingo en Kiev. El problema es que nadie sabe cuánto puede durar."