Esta inesperada llegada a la ciudad de Nueva York, gobernada por demócratas, puso en aprietos a las autoridades locales que tuvieron que montar un dispositivo urgente de acogida. La Alcaldía registra desde mayo más de 4 000 migrantes en sus albergues.
PUBLICIDADA bordo de varios autobuses, un centenar de migrantes llegaron a la ciudad de Nueva York.
Los líderes republicanos del estado de Texas organizaron el traslado con el objetivo de enviar un claro mensaje: la presión migratoria debe ser una carga de todos.
Esta inesperada llegada a la ciudad, gobernada por demócratas, puso en aprietos a las autoridades locales que tuvieron que montar un dispositivo urgente de acogida.
Para Manuel Castro, comisario de la Alcaldía de Nueva York para Asuntos Migratorios, los republicanos buscan agitar el fantasma de la xenofobia.
"Esto es simplemente desafortunado. El gobernador Greg Abbott (Texas) está utilizando a seres humanos con fines políticos y lo hace para incitar el sentimiento antiinmigrante", expresó Castro ante las puertas de la Estación Central de autobuses.
Según fuentes municipales, los envíos de migrantes en autobuses desde Texas se están haciendo sin la menor coordinación a nivel político y con total secretismo. No se informa ni del número de autobuses ni de migrantes.
Denuncian incluso que el Gobien o tejano ha impuesto a las compañías de buses un contrato de confidencialidad.
Este nuevo y público duelo entre republicanos y demócratas pasa desapercibido para los migrantes que cogen el bus. Gustavo Méndez, uno de los tantos migrantes venezolanos que vienieron a bordo, lo explica con practicidad.
"Bueno, ellos pusieron a escoger: o te vas por tu cuenta hacia un sitio que tu quieras, o tomas este bus gratis a Nueva York. Y tomé la posibilidad porque no tengo los recursos para ir a otro lugar", dice.
Pero no toda oportunidad viene sin consecuencias. Otro migrante cuenta la terrible experiencia que fue cruzar México y llegar a Estados Unidos.
"No se lo recomiendo, porque el trato infrahumano que vive uno en este viaje de hecho te deja hasta daño psicológico, el maltrato físico y moral", dice John, un migrante venezolano que prefiere utilizar un nombre falso para no ser reconocido. Además denuncia maltratos por parte de la Policía de México: "Llegamos a los Estados Unidos ya sin dinero porque en México prácticamente los policías te roban, te asaltan, te quitan toda la plata. Decidimos montarnos en el bus que nos dijeron que no era obligatorio, que era voluntario".
Desde mayo han llegado a la ciudad de Nueva York unos 4 000 solicitantes de asilo y refugiados, según cifras de la alcaldía. Los centros de admisión están desbordados por lo que se planea construir nuevas infraestructuras para afrontar la crisis migratoria.