La polémica está en la actuación de los agentes, que respondieron con gases lacrimógenos, dsaconsejados por la FIFA, desencadenando la estampida
Llanto e indignación en Indonesia tras la mortal estampida en un estadio de fútbol. El balance de muertos es de al menos 125.
La tragedia se produjo la noche del sábado en el estadio Kanjuruhan, en la provincia de Java oriental, cuando miles de aficionados del club Arema irrumpieron en el campo tras perder 2-3 frente al Persebaya Surabaya.
La polémica está en la actuación policial, que respondió con gases lacrimógenos, dsaconsejados por la FIFA, desencadenando la estampida.
Los testigos describieron a los agentes golpeando con palos y escudos antes de disparar botes de gas lacrimógeno directamente a la multitud.
Un joven espectador cuenta que estaban "fumando en las gradas y de repente estallaron los disturbios en el campo. Según recuerdo, nadie de la tribuna 14 fue al campo, pero finalmente los policías nos lanzaron gases lacrimógenos. La gente trató de escapar y se empujó entre sí, por lo que muchos cayeron víctimas, incluida mi cuñada".
Es la segunda mayor tragedia de la historia del fútbol mundial y el presidente Joko Widodo ha ordenado una investigación de los procedimientos de seguridad.