Unir y reconciliar Brasil, ese es el principal reto para Lula da Silva, cuyo mandato se anuncia complicado.
Unir y reconciliar Brasil, ese es el principal reto para Luiz Inácio Lula da Silva, cuyo mandato se anuncia complicado. Y es que la mitad del país no le ha votado. Los seguidores de Jair Bolsonaro tratan de digerir la derrota.
"Hoy con gran tristeza declaro que nuestro presidente Jair Bolsonaro no ganó las elecciones pero se ganó el corazón de muchos brasileños. Estamos con usted la próxima vez Jair Messias Bolsonaro. Espero que Luiz Inácio Lula da Silva tendrá un Gobierno limpio, lo que no fue el caso la última vez, espero, que honre los votos que recibió, entre los que no estaba el mío", dice Mariuza de Fátima, seguidora de Bolsonaro.
"Bolsonaro tiene sus defectos, como todo hombre, como todo ser humano, esta es la gente que ya no aguanta al Partido de los Trabajadores, esta es la gente que ya no aguanta el robo... Me lavo las manos, porque hice mi parte, voté a conciencia, voté sabiendo que, por encima de todo, mi Brasil no puede ser dirigido por un bandido", señala Ederson Pereira, seguidor de Bolsonaro.
De nada sirvieron los rezos y plegarias de los partidarios de Bolsonaro. El milagro electoral no llegó.