Miles de muertos y millones de refugiados, la huella que ha dejado la Guerra en Ucrania en 2022

"He decidido llevar a cabo una operación militar especial".
A primera hora del 24 de febrero, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, pronunció estas palabras, que dieron comienzo a una invasión a gran escala en Ucrania. Poco después, las explosiones ya sonaban en la capital, Kiev, y en otras partes del país.
Desde entonces, la guerra ya ha dejado cientos de miles muertos, millones de desplazados y ha destruido ciudades enteras en Ucrania.
Pero antes de todo esto tuvieron lugar semanas de diplomacia, que incluyeron la visita de Francia y Alemania a Moscú. Las sanciones occidentales no lograron disuadir a Putin. Este dejó clara sus exigencias: la retirada de las tropas de la OTAN de Europa del Este y la prohibición de la adhesión de Ucrania, no se cumplieron.
Empieza la ofensiva relámpago
Rusia quiso llevar a cabo una "guerra relámpago", enviando sus tropas desde diferentes partes del país. Su objetivo, tomar Kiev y derrocar al Gobierno en una semana.
Pero Kiev se mantuvo firme y el presidente de ucrania, Volodímir Zelenski, rechazó el salvoconducto de Estados Unidos respondiendo que necesitaba munición, no que le saquaran de allí
En el este, Járkov, la segunda ciudad más grande, fue golpeada por los ataques día y noche. Como en muchos otros lugares, los encarnizados combates obligaron a las familias a pasar a la clandestinidad, y a emplear el metro o los sótanos como refugios antiareos.
En Irpín, a las afueras de Kiev, la gente intentaba desesperadamente escapar de los bombardeos por una peligrosa ruta de evacuación.
"Perdí mi casa, perdí mi vida"
Muchos civiles se vieron obligados a huir. La mayoría de ellos, al rededor de un 90 %, eran mujeres y niños, ya que los hombres ucranianos de entre 18 y 60 años tuvieron que quedarse a luchar debido a la ley marcial.
Según la ONU, se calcula que a finales de mayo había ocho millones de personas desplazadas dentro de Ucrania.
Y más de siete millones de ucranianos cruzaron la frontera y pasaron a ser refugiados en toda Europa.
Polonia fue uno de los principales países de acogida.
"Perdí mi casa, perdí mi vida, tenía un trabajo allí, pero ahora tengo que huir de mi país porque un loco quiere..., ni si quiera sé lo que quiere", confiesa Alina Kosinska, una dentista de 30 años de Zaporiyia que se ha visto obligada a abandonar su hogar por la guerra.
El ejército ruso había invadido el país atacando por cuatro costados. Pero las tropas ucranianas consiguieron detener el avance y hacerlo retroceder. Al final de la marcha, Moscú alejó sus fuerzas de Kiev y del norte hacia el sur y el este de Ucrania.
Durante la ofensiva rusa para apoderarse de toda la región del Donbás a principios de abril, un ataque con misiles rusos contra una estación de tren en Kramatorsk, mató a más de 50 civiles.