Francia sigue en pie de guerra: nueva jornada de protestas contra la reforma de las pensiones

Cientos de miles de personas se manifestaron el sábado por toda Francia para mantener la presión sobre el Gobierno por sus planes de reforma de las pensiones, entre ellos el aumento de la edad de jubilación de 62 a 64 años.
La novedad es que en esta jornada se unieron a las marchas jóvenes y otros opositores que no pudieron asistir a los tres días de acción anteriores por celebrarse en días laborables.
Esta vez, sin embargo, las huelgas de ferroviarios no acompañaron a las marchas, lo que permitió que los trenes y el metro de París funcionaran el sábado. Aunque una huelga no planeada de los controladores aéreos hizo que hasta la mitad de los vuelos con origen o destino en el segundo aeropuerto más importante de París, Orly, se cancelaran el sábado por la tarde.
Algunos disturbios aislados empañaron las protestas. Un coche y varios contenedores de basura fueron incendiados en un céntrico bulevar parisino cuando la policía cargó contra la multitud y dispersó a los manifestantes con gases lacrimógenos.
La policía de París informó a los agentes de que había detenido a ocho personas por infracciones que iban desde el vandalismo a la posesión de un arma de fuego.