Ucrania ha sufrido este viernes uno de los mayores ataques con misiles contra sus infraestructuras críticas, mientras espera convencer a sus aliados de la necesidad de que suministren cazas y repele asaltos rusos en el Donbás.
Los masivos ataques rusos con misiles y aviones no tripulados contra varias ciudades, incluida la capital ucraniana, obligaron el viernes a la población a refugiarse en las estaciones de metro.
"Hoy el enemigo lanzó al menos 70 misiles en otro ataque masivo", declaró el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, en un vídeo colgado en Telegram, donde indicó que "al menos 60 misiles fueron derribados".
Dos de ellos atravesaron espacio aéreo de Moldavia y de Rumanía, según Kiev, una información que el primero de estos países confirma y el segundo desmiente. Dos misiles de crucero Kalibr atravesaron la frontera entre Ucrania y Moldavia a las 10:18 hora local y entraron en el espacio aéreo de Rumanía, integrante de la OAN, a las 10:33 horas, antes de regresar a Ucrania, afirmó el comandante en jefe de las fuerzas armadas ucranianas, Valerii Zaluzhnyi.
Los ataques se produjeron un día después de que el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, solicitara armas de largo alcance a los líderes de la UE.
Volodímir Zelenski ha destacado durante su habitual discurso: "Lo segundo importante de esta semana ha sido nuestro maratón diplomático. Londres, París, Bruselas... estos últimos días he hablado de cómo hacer más fuertes a nuestros soldados en todas partes. Hay acuerdos muy importantes y hemos recibido buenas noticias".
Kiev dice que ya ha presentado una solicitud de aviones de combate F-16 a los Países Bajos, según un tweet.
Sin embargo, Suiza ha rechazado la solicitud que España presentó en enero para exportar dos cañones antiaéreos de 35 mm a Ucrania.