Las protestas ciudadanas por el accidente ferroviario del pasado mes de febrero hacen descender en las encuestas al partido Nueva Democracia, ya no tan favorito.
PUBLICIDADGrecia celebrará elecciones generales el próximo mes de mayo. Así lo anunció el propio primer ministro Kyriakos Mitsotakis durante su primera entrevista desde el accidente ferroviario del pasado mes de febrero, en el que murieron 57 personas y tras el que las protestas contra su Gobierno se han multiplicado.
Las encuestas muestran un notable descenso en intención de voto para Nueva Democracia, ahora mismo en el Gobierno. Las manifestaciones de los últimos días muestran un claro descontento por la ya probada falta de adecuados sistemas de seguridad en la red ferroviaria.
"Definitivamente puedo decirles que las elecciones se celebrarán en mayo", dijo Mitsotakis en la entrevista con la emisora Alpha TV.
Aunque la legislatura termina en junio, desde hace tiempo se espera que los comicios se celebren en mayo, probablemente el día 21. "Mi objetivo es volver a ganar las elecciones y creo que lo conseguiremos", afirmó el jefe del partido Nueva Democracia.
Los últimos sondeos dan a Nueva Democracia tres puntos sobre el izquierdista Syriza, la mitad que antes del siniestro.
El Gobierno conservador ha acusado a Syriza de haber retrasado mejoras de la red ferroviaria cuando estuvo en el poder (2015-2019). Una comisión parlamentaria está investigando porqué aún no se ha ejecutado totalmente el denominado "contrato 717", firmado en 2014 por la empresa estatal de ferrocarriles (OSE) para instalar una serie de medidas de seguridad automatizadas en el tramo Atenas-Salónica, donde se produjo el accidente.
Mitsotakis mantuvo inicialmente la tesis de que el accidente se debió a un error humano y, de momento, han sido imputados cuatro empleados de los ferrocarriles, entre ellos el jefe de estación que puso en la misma vía a un tren de pasajeros y uno de mercancías que acabaron colisionando.
Ante la presión en la calle, Mitsotakis acabó pidiendo perdón y reconociendo la falta de sistemas de seguridad en buena parte de la red ferroviaria.