Moscú y Kiev se culpan mutuamente de provocaciones nucleares y de ataques contra la planta.
Rafael Grossi sigue buscando un acuerdo para proteger la central nuclear de Zaporiyia, controlada por Moscú. El jefe del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) espera que tanto Rusia como Ucrania acuerden "ciertos principios".
La planta ha sido objeto de numerosos ataques desde que comenzó la invasión rusa de Ucrania.
"La idea es acordar ciertos principios, ciertos compromisos, entre ellos no atacar la planta, por ejemplo, y algunos otros", señala Rafael Grossi, director general del OIEA.
"La electricidad no se irá a ninguna parte. Los dos reactores que están operando hoy, están operando en el llamado residuo caliente, lo que significa que no hay generación de electricidad, en este modo no se proporciona. Se produce calor", explicaRenat Karchaa, asesor del operador de energía nuclear de Rusia Rosenergoatom.
Acuerdo de alto el fuego
Grossi, que ha visitado Zaporiyia por segunda vez, lleva meses pidiendo un acuerdo de alto el fuego para esta zona específica. Ambos bandos se culpan de provocaciones nucleares y de ataques contra la planta. Ucrania culpa a Rusia por usar la instalación para actividades militares y exige retirar al personal armado de la central. Moscú insiste en que debe mantener sus fuerzas allí para proteger al mundo de una catástrofe nuclear.