Al menos 457 civiles fueron ejecutados por las tropas rusas en Bucha según cifras ucranianas. Moscú siempre ha negado cualquier responsabilidad y afirma que todo es una invención propagandística. La justicia internacional investiga los asesinatos como crímenes de guerra.
Hace un año, el mundo descubrió con horror imágenes grabadas en las calles de Bucha.
Las tropas rusas se habían retirado, dejando tras de sí cientos de cadáveres de civiles, muchos de ellos abandonados en las calles.
"Cuando Bucha fue desalojada, v imos que el diablo no estaba en algún lugar indefinido, sino sobre el propio terreno", apostilló el presidente ucraniano Volodímir Zelenski en Telegram.
La vida volvió poco a poco a Bucha, pero ninguno de sus habitantes ha conseguido olvidar aquellas semanas de horror.
Tienen grabado a fuego lo que ocurrió en las calles y han dejado testimonios grabados. Muchas de las víctimas fueron enterradas en una fosa común junto a la iglesia del pueblo.
Andriy Golovin, arcipreste ortodoxo asegura: “Es importante que no vivamos en el pasado, sino en el futuro. Para vivir en el futuro, es necesario no sólo vencer, derrotar a los ocupantes, a nuestros vecinos forzados. Pero es muy importante que el mal sea condenado”.
Al menos 457 civiles fueron ejecutados por las tropas rusas en Bucha según cifras ucranianas. Moscú siempre ha negado cualquier responsabilidad y afirma que todo es una invención propagandística. La justicia internacional investiga los asesinatos como crímenes de guerra.
La justicia internacional investiga lo sucedido como crímenes de guerra.