La iniciativa, que ha recaudado ya unos 300 000 euros, les ha proporcionado material de apoyo como baterías industriales, drones y ropa de abrigo pero no incluye armamento
Los Dragones de Transcarpacia, así se llama un batallón de voluntarios húngaros que combaten en el este de Ucrania.
El 23 de octubre de 2022 se publicó un video, en Facebook, en él se ve a los primeros soldados húngaros en entrar en el pueblo de Ambarne, cerca de la frontera entre Ucrania y Rusia, sosteniendo una bandera ucraniana y otra húngara con un agujero, símbolo de la fallida revolución húngara de 1956.
Un grupo de húngaros, que vio este video, decidió ayudar al batallón de defensa, independiente del Ejército ucraniano, llamado "Dragones de Transcarpacia", aportándoles material que no incluye armas.
"Se necesita mucha energía eléctrica para hacer funcionar una guerra moderna. Llevamos un montón de baterías para ellos, grandes baterías industriales, bestias de ocho kilos, un montón de baterías de bolsillo, más pequeñas pero potentes, drones, equipos civiles de visión nocturna, telémetros, polares y calcetines de escalada utilizados en el Himalaya durante el invierno", enumera Balázs Trautmann, uno de los organizadores de esta campaña.
Su iniciativa ha recaudado hasta ahora unos 300 000 euros, de los que ya se han entregado más de la mitad.
Están también en contacto con el profesor Ferenc Sándor, que lucha en la unidad y al mismo tiempo sigue dando clases virtuales desde las trincheras.