La oposición italiana critica la pasividad policial ante un saludo fascista masivo durante una concentración en Roma. El uso de símbolos fascistas, incluido el saludo, se encuentra prohibido por ley en Italia.
Grupos de la oposición en Italia exigieron el lunes que el Gobierno, encabezado por la primera ministra de extrema derecha Giorgia Meloni, explique cómo cientos de manifestantes pudieron realizar un saludo fascista prohibido en una concentración en Roma sin ninguna intervención policial.
El acto del domingopor la noche en un barrio de clase trabajasegadora conmemoró el asesinato en 1978 de dos miembros de un grupo juvenil neofascista en un ataque reivindicado posteriormente por militantes de extrema izquierda.
En un momento de la concentración, los participantes levantaron el brazo derecho en un saludo que recuerda al de la dictadura fascista de Benito Mussolini. Según la legislación de posguerra, el uso de símbolos fascistas, incluido el saludo con los brazos rectos, también conocido como saludo romano, está prohibido.
La líder del Partido Demócrata, Elly Schlein, que encabeza el mayor partido de oposición, estuvo entre quienes exigieron el lunes que el ministro del Interior de Meloni compareciera en el Parlamento para explicar por qué la policía aparentemente no hizo nada para detener la manifestación.
La oposición denuncia un doble rasero
Schlein y otros indignados por el uso del saludo fascista en la manifestación recordaron con ironía lo ocurrido el mes pasado, cuando un asistente a una sesión de ópera gritó "¡Viva la Italia antifascista!" y fue rápidamente rodeado por la policía antiterrorista de Italia."Si gritas 'Viva la Italia antifascista' en un teatro, te identifican (la Policía); si vas a una reunión neofascista con saludos romanos y pancartas, no", dijo Schlein en una publicación en la red social X. “¿Meloni no tiene nada que decir?”, añadió.
Según la televisión estatal Rai, la Policía italiana investiga el saludo masivo en la manifestación. Presionado por los periodistas en una conferencia de prensa sobre otro tema, el viceprimer ministro y jefe de la diplomacia italiana, Antoni Tajani, que lidera un partido de centroderecha en la coalición de Meloni, señaló que la ley italiana sostiene que apoyar al fascismo está prohibido. Todas las manifestaciones "en apoyo a las dictaduras deben ser condenadas", afirmó.