Miles de refugiados ucranianos y rusos han estado huyendo a Serbia desde el comienzo de la guerra hace dos años. Algunos de ellos entraron a Serbia únicamente como país de tránsito para llegar a Europa occidental, otros se quedaron.
Hasta ahora 150.000 rusos y 16.000 ucranianos han sido acreditados oficialmente como refugiados con residencia en el país de los Balcanes Occidentales.
Es el caso de Zhenya, quien vino de Sajalín, en el este ruso, apenas un par de semanas después del inicio de la guerra y se instaló en la ciudad serbia de Novi Sad: "Cuando empezó la guerra nos sentimos muy mal. Lloramos durante varios días. Me sentí como si estuviera en una jaula. Siento, quizás no culpa, sino responsabilidad, que mi país mate a gente de un país vecino en mi nombre".
Debido a los requisitos de visado de la UE, Serbia considera a los rusos refugiados
La razón por la que los rusos se quedan en Serbia es que necesitan visados para establecerse en la Unión Europea. Los ucranianos que se quedaron en Serbia quieren volver a su país. El marido de Ivanna está ahora en Kiev después de un año de lucha en primera línea en el frente de batalla. "Hace dos años que no veo a mi marido. Vivía con mi madre y mi hermana en la ciudad de Kamenjec-Podoljski. Se está muy bien Serbia, pero es mejor en casa". Un año después de la invasión rusa había más de cinco millones de refugiados internos en Ucrania.
Según cifras oficiales, hasta el momento unos 80.000refugiados ucranianos han pasado por Serbia y se han asentado en la UE. Las ayudas y subvenciones han ido disminuyendo en algunos países como Irlanda. Dependiendo de la organización interna de cada país las posibilidades de integración han sido mayores o menores. En España tan sólo 14.000 refugiados -un 15%- han logrado un empleo frente a una media europea del 40%.