El Ejército israelí solo ha confirmado que el rescate se produjo en una "operación compleja" en un túnel en el sur de Gaza.
PUBLICIDADIsrael ha conseguido sacar con vida a uno de los rehenes capturados por Hamás durante el ataque de la milicia islámica del pasado 7 de octubre. Según ha confirmado el Ejército, el rescate se ha producido en una "operación compleja" en un túnel del sur de la Franja de Gaza. Se desconoce si ha habido víctimas o heridos durante su desarrollo.
Qaid Farhan Alkadi, de 52 años, es uno de los ocho israelíes pertenecientes a la minoría árabe beduina retenidos desde octubre en territorio palestino. Alkadi, que tiene dos esposas y es padre de 11 niños, trabajaba en una fábrica del kibutz de Maguén.
El hombre, que llevaba 326 días en cautiverio, había pasado por distintas ubicaciones. La última: uno de los túneles subterráneos de Hamás. "Espero que todos los rehenes vuelvan a casa para que las familias puedan experimentar esta felicidad", decía a los medios un familiar.
Alkadi es el octavo rehén rescatado con vida por el Ejército de Israel, y el primero en ser liberado del subsuelo. Aunque la operación supuso un motivo de celebración para los israelíes, todavía quedan decenas de ciudadanos retenidos por la milicia islamista.
Una "presión militar incesante" en Gaza
Benjamin Netanyahu, el primer ministro de Israel, aseguró que confía en las operaciones de rescate y en las negociaciones para sacar a los rehenes que siguen retenidos en Gaza. Según el mandatario, "ambas vías exigen nuestra presencia militar sobre el terreno y una presión militar incesante sobre Hamás".
Estas declaraciones se producen mientras los países mediadores en el conflicto, Catar, Egipto y EE.UU., continúan las conversaciones esta semana en Egipto, con el objetivo de alcanzar un alto el fuego entre Israel y Hamás. Por el momento, sigue sin haber avances significativos.
Las familias de las víctimas, y buena parte de la ciudadanía israelí, han criticado a Netanyahu por no haber alcanzado un acuerdo con Hamás para que entregue a los 108 rehenes que se calcula que siguen en manos de la milicia islámica. Hamás espera conseguir un alto el fuego, la salida de las tropas israelíes de Gaza, y la liberación de un gran número de prisioneros palestinos a cambio de los rehenes.
Hamás capturó a unas 250 personas y mató a otras 1.200 en el ataque del 7 de octubre a Israel. Desde entonces, la ofensiva israelí en represalia por el atentado ha dejado más de 40.000 muertos en Palestina y ha provocado el desplazamiento interno del 90% de la población de Gaza.