Antes de la cumbre, Zelenski aseguró estar "siempre dispuesto" a la celebración de elecciones en Ucrania. Por la mañana se reunió con el Papa León XIV, antes de mantener una cita de una hora y media con la primera ministra italiana.
La reunión en el Palazzo Chigi entre la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, y el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha concluido. La cumbre, que comenzó poco después de las 15:00, se prolongó durante aproximadamente una hora y media.
Antes del encuentro con la primera ministra, Zelenski declaró a 'la Repubblica' y 'Il Messaggero' que "confía en Meloni" en el proceso de negociaciones de paz. Añadió que "cree que nos ayudará" y que está "siempre listo" para unas elecciones, en respuesta a las críticas de Donald Trump, quien considera necesarias unas elecciones en Ucrania.
El vehículo del presidente ucraniano accedió al edificio gubernamental, mientras, en Via del Corso, numerosas personas aguardaban detrás de las barreras el paso de la comitiva, algunas de ellas ondeando banderas ucranianas.
A su llegada, aún permanecían en la zona los participantes del 'flash mob' (multitud instantánea) organizado por +Europa para instar a los europeos a "reaccionar" tras "el ataque de Trump a Europa". La movilización, celebrada junto al Palacio Montecitorio, contó con la presencia de los eurodiputados Riccardo Magi y Benedetto Della Vedova, de +Europa; Filippo Sensi, del PD; Giulia Pastorella, de Azione; y el representante de Europa Ahora, Eric Joseph.
Los asistentes desplegaron una gran pancarta formada por las 27 banderas de la Unión Europea cosidas entre sí, con la de Ucrania en el centro, a modo de abrazo simbólico.
Magi pidió al Gobierno italiano que "salga de la ambigüedad", recordando que "Ucrania defiende los valores de Europa, el Estado de derecho y la democracia liberal; su destino afecta al futuro de la seguridad de todo el continente".
Encuentro con el Papa León XIV
La cumbre en el Palazzo Chigi tuvo lugar después de la visita de Zelenski al Vaticano. La jornada italiana del presidente ucraniano comenzó a las 9:40 el martes con su llegada a Castel Gandolfo, donde actualmente reside el pontífice. Tras una conversación de unos 30 minutos, ambos se asomaron juntos al balcón de Villa Barberini, la residencia de la Santa Sede en la localidad a las afueras de Roma.
El Papa reiteró la "necesidad de continuar el diálogo" y renovó su "urgente esperanza de que las iniciativas diplomáticas en marcha puedan conducir a una paz justa y duradera". Según la Oficina de Prensa de la Santa Sede, durante la "cordial" conversación centrada en la guerra en Ucrania, se abordaron también la situación de los prisioneros de guerra y la necesidad de "garantizar el regreso de los niños ucranianos a sus familias".
Zelenski afirmó en Telegram que informó a León XIV "sobre el trabajo diplomático con Estados Unidos" y que habló de "los esfuerzos adicionales y de la mediación del Vaticano para el retorno de nuestros niños secuestrados por Rusia". Agradeció el apoyo del pontífice y lo invitó a visitar Ucrania, una visita que, dijo, sería "una fuerte señal de apoyo" para su pueblo.
Las críticas de Trump
En paralelo, Donald Trump volvió a criticar a los líderes europeos en una entrevista con 'Politico'. "Creo que son débiles", declaró, antes de añadir: "Quieren ser políticamente correctos. Europa no sabe qué hacer". Sobre la guerra en Ucrania afirmó: "Hablan, pero no producen. Y la guerra sigue y sigue".
El presidente estadounidense insistió también en que "ha llegado el momento de convocar elecciones en Ucrania", una postura que refleja claramente el discurso promovido desde Moscú. "Están utilizando la guerra para no hacerlo, pero el pueblo ucraniano debería tener esa opción. Hablan de democracia, pero llega un punto en el que ya no es una democracia", aseguró.