Abierta, honesta, exclusiva: Marla Svenja Liebich, que llegó a ser conocida como la "sintonizadora nazi", habló en una entrevista exclusiva con 'Euronews' sobre su condena, su vida y su futuro.
Marla-Svenja Liebich quiere volver a cambiar de sexo y de nombre. Pero esta vez es más complicado de lo que pensaba. "Quiero separar mi vida privada del personaje de ficción", dice Liebich en una entrevista con 'Euronews'.
Esconderse y una orden de detención
El 29 de agosto, Liebich debe cumplir una pena de prisión en la cárcel de mujeres de Chemnitz, y pasa a la clandestinidad. En julio de 2023, Liebich fue condenado como hombre a un año y medio de cárcel por incitación al odio. Con una simple declaración, Liebich cambia su sexo y su nombre de pila en el registro civil de Schkeuditz, en el noroeste de Sajonia, y pasa a ser reconocida oficialmente como mujer. El incidente desata todo un debate. Se sospecha que la inscripción del sexo sólo se cambió para burlarse de la Ley de Autodeterminación.
¿Crisis de identidad o burla del Estado de Derecho?
"En retrospectiva, estoy segura de que mucha gente piensa que lo planeé todo, pero no es así. Simplemente reacciono siempre de la forma más suave posible", dice Liebich, citando a Bruce Lee: "Be water, my friend" (sé como el agua, amigo...). Pero incluso ser mujer ya no está bien para Liebich. "Por todo el odio y la agitación contra mí", dice Liebich a 'Euronews'. Sin embargo, la figura pública seguirá existiendo independientemente del nombre. "Marla Svenja Liebich es una marca y simplemente vive sin envejecer. El avatar está separado de la persona", dice Liebich, quien agrega que nunca quiso el "circo" público.
¿Miedo a un escándalo?
Pero la cosa se pone más extraña: Liebich dice tener una crisis de identidad. El 5 de agosto de 2025, Liebich registra en el registro civil un nuevo cambio de nombre. Liebich no quiere revelarsu nuevo nombre. Si se hiciera público, sería una "bomba termonuclear" mediática, dice Liebich. La elección del sexo es ahora "diverso" o "no registrado".
El periodo de espera legal es de al menos tres meses. La cita para el cambio de registro estaría prevista para el 6 de noviembre. Sin embargo, la oficina insiste en la asistencia personal. Esto pesaba más que el interés individual. Liebich considera que insistir en la comparecencia personal es desproporcionado. Según Liebich, una firma ante notario sería completamente suficiente. La Ley de Autodeterminación es un derecho fundamental y afecta a la dignidad humana.
Liebich cree que el segundo cambio de nombre debería impedirse con la detención. "Nadie esperaba que se cancelara", dijo Liebich a 'Euronews'. Liebich ha presentado un recurso contra la decisión. 'Euronews' dispone del correspondiente documento. Tiene de plazo hasta el 6 de febrero de 2026 para firmarlo.
Buscado internacionalmente
Sin embargo, según Liebich, ahora existe una orden de detención europea contra su persona, para todo el espacio Schengen. "Entonces me detendrían", dice Liebich. Pero comparecer en persona también podría ser difícil por razones logísticas. Según los rumores, Liebich podría haberse fugado hace tiempo a Rusia.
Rumores sobre Rusia
Un día después de que Liebich se escondiera, aparecieron rumores en X de que Liebich podría estar en Rusia. Durante los días siguientes a la fuga, Liebich comparte imágenes generadas por IA con Moscú de fondo. Por el momento no se puede verificar si Liebich se encuentra realmente en Rusia.
Liebich dice: "Primero tendría que volver a Königsberg -eso sería fácil- y luego a Alemania sin que me controlaran en la frontera. Por supuesto que no puedo". Liebich culpa de todo a la izquierda y a los Verdes: intentaron inculpar a Liebich como nazi. "Siempre me disparaban directamente".
Condena
Sobre la condena, Liebich dice que fue una ofensa de opinión. "Nada flagrante. Sólo querían que me fuera [...] Tengo en blanco y negro todo lo que no era legal. Mi recurso de inconstitucionalidad era formalmente correcto, pero decidieron no aceptarlo", dice Liebich.
Liebich culpa a los procesos internos de la Fiscalía: el fiscal Benedikt Bernzen "del SPD en el Oeste" fue nombrado en lugar de Anacker, el anterior fiscal "que paró la mayoría de los casos porque no cruzaban el umbral de la responsabilidad penal", dice Liebich. "Bernzen me dijo que estudiaría detenidamente lo que podía llevar a los tribunales". Los investigadores habían recogido material en las manifestaciones y seguían personalmente a Liebich a todas partes.
Últimas palabras ante el tribunal
Liebich se mantiene fiel a su estilo a la hora de dictar sentencia: cuando se le pregunta por las últimas palabras, Liebich dice que esto podría llevar entre 14 y 16 horas. "Resultaron ser 29 horas".
¿Neonazi o Till Eulenspiegel?
Algunos demonizan a Liebich como neonazi, otros lo comparan con Till Eulenspiegel. Liebich cree que la imagen pública ha cambiado entretanto: "En los 110 días ya he conseguido disipar esta imagen de mí en la mente de mucha gente".
Pero Liebich no puede deshacerse de ella. "Ya no quiero ser Marla Svenja porque otros me lo han negado". "Desde el 15 de enero, soy el famoso maricón nazi. De eso no te puedes librar ni con medidas cautelares".
Nota editorial: 'Euronews' no tiene conocimiento del paradero actual de Marla Svenja Liebich. La entrevista se realizó por escrito.