El Vaticano ha publicado esta semana estadísticas según las cuales 3,2 millones de personas han participado este año en liturgias vaticanas, audiencias, oraciones del Ángelus y audiencias jubilares.
El Papa León XIV clausuró el miércoles el año 2025 con una oración para que la ciudad de Roma sea un lugar más acogedor para extranjeros y personas frágiles, jóvenes y mayores.
El Pontífice presidió un servicio de vísperas de Nochevieja en la Basílica de San Pedro, dando gracias por el Año Santo 2025, que atrajo a millones de peregrinos a Roma en la celebración del Cristianismo, que se celebra una vez cada cuarto de siglo.
En su homilía, León XIV dio las gracias a la ciudad de Roma y a los voluntarios que ayudaron a gestionar a las multitudes que visitaban San Pedro y atravesaban su Puerta Santa.
Recordó que el Papa Francisco, que inauguró el Año Santo el 24 de diciembre de 2024, había pedido que Roma fuera un lugar más acogedor. "Me gustaría que volviera a serlo y diría que aún más después de este tiempo de gracia", dijo el Papa.
"¿Qué podemos desear a Roma? Que sea digna de sus pequeños. De los niños, de los ancianos solos y frágiles, de las familias que luchan por salir adelante, de los hombres y mujeres que han venido de lejos con la esperanza de una vida digna". En los bancos estaba el alcalde de Roma, Roberto Gualtieri, y otros dignatarios.
Además del Jubileo, 2025 fue trascendental por la transición papal tras la muerte de Francisco en abril y la elección por los cardenales del primer Papa de la historia procedente de Estados Unidos.
El Vaticano publicó esta semana estadísticas que muestran que 3,2 millones de personas han participado en liturgias vaticanas, audiencias, oraciones del Ángelus y audiencias del Jubileo este año.
Las cifras fueron bajas en el primer trimestre, debido a la larga hospitalización y enfermedad de Francisco, pero se dispararon considerablemente tras la elección del Papa León XIV en mayo.