El Brexit es una montaña rusa por la que se desliza la libra al brusco vaivén de las negociaciones entre Londres y Bruselas. Este jueves, la moneda británica subió más del 1% con respecto al euro, pero poco después perdió todo lo ganado y algo más...
El Brexit es una montaña rusa por la que se desliza la libra al brusco vaivén de las negociaciones entre Londres y Bruselas. Este jueves, la moneda británica subió más del 1% con respecto al euro después de que el primer ministro anunciara que se había alcanzado un acuerdo que evitaría un Brexit duro. Poco después, la libra perdió todo lo ganado y algo más. El Partido Unionista Democrático, cuyo apoyo es imprescendible para Boris Jonhson, había rechazado el pacto.
Según el FMI, un Brexit duro le podría costar al Reino Unido hasta un 5% de su producto interior bruto. A la UE, un 0,5%.
La flamante Directora Gerente del FMI, Kristalina Georgieva, se apresuró celebrar el acuerdo entre Londres y Bruselas, que calificó de buena noticia. "Salté igual que la libra", dijo.
El presidente del Banco Mundial relacionó por su parte la incertidumbre con la ralentización económica. "Si hubiera más certeza en Europa, sería de gran ayuda", sentenció.
Los mercados europeos experimentaron alzas, pero retrocedieron hasta cerrar con ligeras pérdidas ante las dudas sobre la viabilidad del pacto. Aún así, el analista Robert Halver considera que el "peligro de que no haya acuerdo el 31 de octubre está definitivamente descartado. "En caso de emergencia habrá una prórroga, pero, en general, Europa vuelve a ser feliz".
El acuerdo puede ser rechazado el sábado por el Parlamento británico y ser ratificado más tarde tras la celebración de unas elecciones generales.