El artista iconoclasta francés, Abraham Poincheval, se dispone a un nuevo encierro voluntario dentro de una estatua.
PUBLICIDADEl artista iconoclasta francés, Abraham Poincheval, se dispone a un nuevo encierro voluntario dentro de una estatua. Sus dos hijos se despiden de él con un expresivo "Bon voyage!".
Este viajero inmóvil permanecerá 7 días y 8 noches, en una especie de sarcófago vertical con cabeza de león, reproducción de una estatuilla del paleolítico.
La actuación es un encargo del Ministerio de Cultura y se encuentra un parque de Aurignac, al suroeste de Toulouse, en la región de Mediodía-Pirineos, departamento de Alto Garona.
Su anterior 'performance' consistía en incubar huevos hasta hacerlos eclosionar envuelto en un edredón.
En otras obras buscaba quedar "encapsulado" al introducirse en el vientre de un oso durante dos semanas o navegando en el Ródano como un mensaje, dentro de una botella.
Incrustado cual ermitaño en una fría roca, con estos encierros, Poincheval muestra su claustrofilia, en aventuras sin trayecto que según reconoce son un viaje al interior de sí mismo.