De Tailandia a Cuba, de Brasil a Marruecos, el turismo sexual es un negocio. Muchas páginas web ofrecen escapadas eróticas mientras las autoridades de los países pobres miran hacia otro lado, con la excepción de algunos arrestos ocasionales de turistas. UNICEF estima que más de un millón de niños al año son arrastrados al mercado del sexo.
En esta edición de The Network abordamos el tema con Amaelee McCoy de UNICEF desde Bangkok, Ariane Couvreur de ECPAT desde el Parlamento Europeo en Bruselas, y con Cecilia Wikstrom, miembro del Grupo de la Alianza de los Demócratas y Liberales por Europa desde Uppsala, en Suecia.