La OTAN ha convocado un reunión extraordinaria y pide contención a ambas partes
La Unión Europea considera inaceptables las acciones de Rusia en el mar de Azov.
A través de un tuit, el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, ha condenado el uso de la fuerza y ha dicho que Moscú "debe liberar a los marineros, los barcos y abstenerse de nuevas provocaciones".
La OTAN ha convocado por su parte una reunión extraordinaria y ha defendido "el derecho de Ucrania a navegar en sus aguas territoriales".
Moscú controla de facto el estrecho de Kerch desde la anexión de Crimea y especialmente desde la construcción del puente que une la península con el territorio de Rusia.
El embajador de Rusia ante la Unión Europea, Vladímir Chizhov, ha explicado a Euronews que "por razones geológicas, el paso al mar de Azov a través del canal Kerch es difícil" porque es estrecho y es necesario excavar periodicamente para hacerlo más profundo. "Esa es la razón por la que los barcos que navegan deben ser escoltados por la guardia costera de Rusia", ha dicho.
A ello hay que sumar las inspecciones a los barcos ucranianos y que según Bruno Lete, analista de la German Marshall Fund, deberían hacerse de acuerdo con la legislación internacional y en coordinación con los otros países que utilizan estos pasajes. "La cortesía obliga a Rusia, al menos, a coordinarse con Ucrania antes de abordar los barcos para inspeccionarlos o para ayudarlos a cruzar el estrecho", explica Lete. "Y Rusia no ha hecho ninguna de estas cosas".
La OTAN pide contención para detener la escalada de la tensión.
