Y justifica su impopularidad diciendo que es lógica ya fue elegido por los contribuyentes estadounidenses y no por los europeos
El presidente estadounidense, Donald Trump, está convenciodo de que "podría ser la persona más popular de Europa", si se presentara a unas elecciones.
Considera que su discurso sería bien recibido y ha justificado su falta de popularidad en el Viejo Continente diciendo: "no he sido elegido por los europeos sino por los estadounidenses, los contribuyentes estadounidenses". Y ha explicado que no estaría haciendo su trabajo si fuese popular en Europa.
Respondía así a un artículo de opinión publicado por Mitt Romney, excandidato a la Presidencia, en el que destacaba el bajo nivel de aprobación del presidente estadounidense en Europa.