Veinte organizaciones ecologistas han lanzado una recogida de firmas para obligar a la Unión Europea a legislar y a prohibir los anuncios de energías fósiles, incluidos los patrocinios.
Prohibir la publicidad de combustibles fósiles en la Unión Europea. Este es el objetivo de la recogida de firmas que han lanzado 20 organizaciones medioambientales.
Necesitan recabar un millón de firmas en al menos siete países en el plazo de un año para obligar a Bruselas a legislar.
Tras haber analizado un total de 3.000 anuncios, acusan al sector energético, pero también a las industrias automovilística y aeronáutica, de distorsionar la realidad.
"En casi dos tercios de los casos, la publicidad de las empresas de combustibles fósiles engaña al público" explica Paul Musiol, portavoz de Greenpeace. "Y lo hace presentando las empresas como más ecológicas de lo que realmente son, haciendo demasiado hincapié en las inversiones que realizan por ejemplo en el ámbito de las energías renovables. Y también en ámbitos como la captura y el almacenamiento de carbono, que tardará demasiado tiempo antes de lograr el tipo de impacto que necesitamos para abordar la crisis climática".
El objetivo de la recogida de firmas es lograr una prohibición similar a la que en 2005 llevó a la supresión de la publicidad de tabaco. Ahora la prohibición afectaría al sector energético, pero también a las compañías aéreas y los modelos de coches que utilizan energías fósiles.
Para reforzar la iniciativa, ochenta activistas han bloqueado este lunes el acceso a la refinería que la compañía Shell tiene en el puerto de Rotterdam.