Volodímir Zelenski recuerda ante el parlamento blega que la paz es más importante que las tiendas de diamantes del país, afectadas por las sanciones europeas contra Rusia.
El himno nacional de Ucrania ha sonado en el parlamento belga que se ha reunido en una sesión plenaria para escuchar a Volodímir Zelenski. El presidente de Ucrania siempre menciona cuestiones relacionadas con el país al que se dirige. En el caso de Bélgica, es el comercio de diamantes con Rusia el que se ve afectado por las sanciones occidentales contra Moscú.
"Pueden hacer más para ayudarnos a desalojar a los ocupantes y ganar la preciosa paz. Creo que la paz es más valiosa que las tiendas de diamantes", ha pedido el presidente de Ucrania.
Un atronador aplauso se oyó al final del discurso del presidente ucraniano. La respuesta del gobierno y el parlamento belga es de pleno apoyo a Kíev. “Ya hay algo en el paquete de sanciones sobre los diamantes, y Bélgica nunca ha estado en contra de ninguna sanción propuesta por la Comisión Europea. No tenemos ningún tabú”, ha asegurado la ministra de Exteriores, Sophie Wilmès.
"Mi mensaje es extremadamente claro: el Kremlin y el régimen de Putin no comprarán el silencio y la inacción de Bélgica con diamantes, petróleo o gas", ha recordado el diputado de Los Verdes en el Parlamento belga. Samuel Cogolati.
Sin embargo, este apoyo no llega hasta la participación en el conflicto, como dijo el primer ministro belga Alexander De Croo. Bélgica ha brindado apoyo al país desde el inicio de la guerra y no solo a través de la acogida de refugiados.
Estuvimos entre los primeros países que enviaron suministros (a Ucrania) suministros militares, médicos y humanitarios. Hace una semana también decidimos enviar suministros adicionales", ha insistido la ministra de Defensa, Ludivine Dedonder.
Zelenski tocó la fibra sensible de los parlamentarios belgas al comparar el martirio de la ciudad de Mariupol con el de la cruenta batalla de Ypres, durante la Primera Guerra Mundial. Una referencia que llevó a los políticos belgas a prometer que la ayuda no se detendrá