El excanciller alemán Gerhard Schröder ha ocupado posiciones de poder en empresas rusas como Gazprom.
PUBLICIDADLos eurodiputados quiere que el ex canciller alemán Gerhard Schröder sea también incluido en la lista de sanciones contra Rusia por sus estrechos vínculos con el presidente ruso Vladimir Putin.En una votación han desaprobado su decisión de mantener sus cargos directivos en empresas energéticas rusas a pesar de la invasión rusa de Ucrania.
El texto recibió el voto a favor de 575 eurodiputados, lo que manda un claro mensaje político. "He respetado mucho al señor Schröder como canciller, pero con su trabajo en este momento, tras las decisiones de la UE y del gobierno alemán, no solo no es útil, sino que actúa activamente en contra de la política común de defensa de los valores europeos. Y por lo tanto tiene que estar en una lista de sanciones", ha explicado el eurodiputado alemán del Partido Popular Europeo, Andreas Schwab.
Schröder fue canciller de Alemania de 1998 a 2005. Tras perder las elecciones ante Angela Merkel, asumió puestos de poder en empresas energéticas rusas, o parcialmente rusas, como Gazprom y Nord Stream 2, lo que provocó críticas por los posibles conflictos de intereses.
Schröder se ha mantenido en su puesto tras la invasión rusa de Ucrania, lo que le ha convertido en persona non grata, incluso en su propia familia política, el Partido Socialdemócrata Alemán, el SPD. Uno de los eurodiputados socialdemócratas alemanes, Jens Geier, ha explicado en un correo electrónico a Euronews que "las declaraciones y acciones de Gerhard Schröder no tienen absolutamente nada que ver con las convicciones y la actitud del SPD". Además, ha insistido en que "estamos clara e inequívocamente con Ucrania. Es trágico que Gerhard Schröder haya elegido el lado equivocado de la historia. Actúa como un hombre de negocios", ha asegurado Geier.
Si la UE añade el nombre de Schröder a su lista de sancionados, sus activos podrían ser congelados. Pero la votación en el Parlamento Europeo no es jurídicamente vinculante y depende de la Comisión Europea proponer nuevas sanciones.