Euronews ha hablado con Mònica Guiteras Blaya, de Enginyeria Sense Fronteres, sobre el aumento de la crisis energética para quienes no pueden pagar las facturas.
La situación para familias y hogares con dificultades para pagar sus facturas de electricidad y gas ha empeorado entre el aumento de los precios y la ola de calor en Europa.
Informar a los más vulnerables
Mònica Guiteras Blaya trabaja en Barcelona con Enginyeria Sense Fronteres para ayudar a los más vulnerables a estar informados sobre cómo reducir sus facturas energéticas.
"Es una situación muy difícil para las familias y hogares en general", comenta. "Pero para quienes están en situación de pobreza energética, ha empeorado considerablemente porque la falta de estabilidad hace muy difícil a las familias organizar su economía, organizar lo que van a gastar en cada necesidad básica de su día a día".
La inflación alcanzó el 8,6% el mes pasado, impulsada sobre todo por los precios de la energía en toda la eurozona, según datos de Eurostat.
En España, no se trata solo de calentar los hogares en invierno, sino de soportar el calor extremo de este verano.
No encender los ventiladores por miedo a la factura
"Estamos hablando de gente que no puede ni tener encendidos todo el día los ventiladores. Quizás podrían, pero tienen miedo de lo que costaría al final en sus facturas mensuales".
Guitera Blaya organiza asambles colectivas para conseguir que quienes sufren pobreza energética adquieran los conocimientos necesarios para pedir ayuda y superarla. Habla sobre el aumento de las personas peocupadas que buscan información y que no tienen una red de apoyo.
Denuncia que los límites a los precios del gas establecidos por el Gobierno no son suficiente y que son necesarios mayores cambios estructurales para que las familias no sufran los impactos de los cambios del mercado.
"Creemos que la energía es un derecho humano", sentencia.