Irakli Kobakhidze es optimista sobre la posibilidad de restablecer una asociación estratégica con Estados Unidos y Georgia, suspendida bajo el régimen de Biden bajo la presidencia de Donald Trump, según declara el primer ministro georgiano a Euronews en una entrevista exclusiva.
En la entrevista para 'The Europe Conversation', Kobakhidze se refirió a una ley de transparencia aplicada en Georgia -muy criticada por la embajada estadounidense bajo la administración Biden- que simplemente implicaba "presentar las declaraciones financieras anuales de las ONG al Ministerio de Justicia de Georgia".
Sobre la decisión de la Casa Blanca de Trump de suspender USAID, declaró: "por supuesto, estos acontecimientos nos hacen ser muy optimistas de que podemos restaurar la asociación con Estados Unidos. "
"Hemos dicho, manifestado muy claramente que Georgia está dispuesta a restablecer la asociación estratégica con Estados Unidos", añadió.
Kobakhidze también afirmó que le gustaría restaurar la función de Georgia como conector entre Europa y Asia.
"Nos gustaría seguir reforzando la asociación con los países relevantes a ambos lados del comercio con Europa, con Estados Unidos. Y al mismo tiempo con los países del Cáucaso Sur, con los países de Asia Central, con China", comentó, y añadió: "Creo que estas tendencias, las tendencias positivas de las que disfrutamos en este momento pueden promover el restablecimiento de nuestra función estratégica".
En su primera entrevista después de que el país del Cáucaso Sur pusiera en pausa sus conversaciones de adhesión a la UE, Kobakhidze afirmó que seguía siendo muy optimista sobre la posibilidad de ingresar en la UE en 2030.
Afirmó que Bruselas debe ser más flexible en las conversaciones de adhesión a la UE, que la pelota está en el tejado de Bruselas y que el bloque debe ser más flexible en su acercamiento a los nuevos miembros.
Kobakhidze fue reelegido en noviembre como primer ministro por el partido gobernante Sueño Georgiano, cuya controvertida victoria en las elecciones parlamentarias de octubre ha provocado manifestaciones masivas y ha llevado a la oposición a boicotear el Parlamento.