Una mujer de 37 años y su hija de dos años fallecieron el sábado, dos días después de resultar heridas el pasado jueves en el atropello múltiple que hirió al menos a 39 personas en la capital bávara.
Según informaron las autoridades locales, una mujer de 37 años y su hija de dos años fallecieron este sábado en el hospital debido a la gravedad de las heridas que sufrieron en el fatídico atropello en masa del pasado jueves en Múnich.
El incidente, ocurrido el jueves, dejó al menos 39 personas heridas cuando un automóvil embistió contra un grupo de manifestantes que participaban en una huelga organizada por el sindicato Verdi que exigía un aumento en los salarios de los funcionarios públicos.
El sospechoso, un ciudadano afgano, fue detenido inmediatamente en el lugar de los hechos. Las autoridades alemanas indicaron el viernes que el atacante habría actuado con un "motivo islamista", aunque señalaron que no hay evidencia que vincule el incidente con organizaciones terroristas.
Joachim Hermann, ministro del Interior del estado de Baviera, descartó cualquier conexión entre el ataque y la Conferencia de Seguridad de Múnich que se celebraba en la ciudad esta semana.
El canciller alemán, el socialdemócrata Olaf Scholz, acudió al lugar del atropello el sábado, donde depositó flores en honor a las víctimas e hizo un llamamiento a "estar juntos ahora y asegurarnos de que nuestro país permanece unido". "Cosas como éstas no deberían ocurrir", declaró, agradeciendo la labor de los equipos de emergencia. También dijo que el atacante será castigado "con toda la dureza de la ley".
Este fue el quinto de una serie de ataques protagonizados por inmigrantes en los últimos nueve meses, lo que ha puesto el tema migratorio en el foco de la campaña electoral del próximo 23 de febrero.