Algunos eurodiputados deploraron que la Comisión Europea recurriera al artículo 122 del Tratado de La UE para evitar una votación sobre el nuevo instrumento propuesto de 150.000 millones de euros para financiar los gastos en Defensa. Otros están menos preocupados.
El Parlamento Europeo ha sido marginado del proceso de toma de decisiones sobre el recientemente anunciado plan de 800.000 millones de euros para intensificar sus esfuerzos a la hora de prestar apoyo a Ucrania a corto plazo y garantizar su autonomía estratégica para reforzar la defensa comunitaria a largo plazo.
Como parte del llamado plan Rearmar Europa, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha propuesto crear un nuevo instrumento financiero, dotado con 150.000 millones de euros en préstamos al amparo del artículo 122 del Tratado de la UE, que permite al Ejecutivo comunitario presentar un texto directamente al Consejo de la UE en caso de emergencia, saltándose así al Parlamento Europeo.
"Esta es la única posibilidad de ayuda financiera de emergencia, y es lo que necesitamos ahora", señaló Ursula von der Leyen a los eurodiputados en Estrasburgo, añadiendo que el Ejecutivo de la UE mantendría informado al Parlamento Europeo de los progresos. El artículo 122 se introdujo por primera vez en los Tratados de la UE en 2007 y desde entonces se ha utilizado en muy pocas situaciones, entre ellas durante la pandemia de COVID-19.
El artículo permite a la UE acordar "medidas adecuadas a la situación económica, en particular si surgen dificultades graves en el suministro de determinados productos", sin el consentimiento del Parlamento Europeo. La decisión de Ursula von der Leyen ha provocado reacciones encontradas entre los eurodiputados, incluso de su propio grupo político.
Manfred Weber, que lidera el grupo del Partido Popular Europeo (PPE) en la Eurocámara, ha indicado que se necesita más legitimidad democrática en el proceso y que el Parlamento Europeo debe participar plenamente en él. "Pasar por alto al Parlamento con el artículo 122 es un error. La democracia europea se sostiene sobre dos pilares: sus ciudadanos y sus Estados miembros, y necesitamos a ambos para nuestra seguridad", señaló Weber a sus homólogos en el pleno comunitario en Estrasburgo.
Giro del bloque comunitario hacia la derecha
La semana pasada, la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, declaró que durante las pasadas elecciones europeas, celebradas en el mes de junio de 2024, la Eurocámara vio un gran giro hacia la derecha y "cada vez más gente votando por un sentimiento de frustración y desesperación".
Metsola indicó a los líderes de la UE durante la cumbre extraordinaria del Consejo Europeo del 6 de marzo que "trabajar a través del Parlamento Europeo, especialmente en decisiones de esta magnitud, es una forma de fomentar la confianza en nuestra Unión Europea".
Así, añadió que es "necesario actuar con rapidez, pero actuar juntos es la única manera de garantizar un respaldo público amplio y profundo". Al mismo tiempo, prometió que el Parlamento se adaptaría a las exigentes circunstancias trabajando con rapidez, eficiencia y eficacia. La Eurocámara tuvo este miércoles la oportunidad de pronunciarse sobre el plan, pero solamente a través de una resolución no legislativa, aprobada por 419 votos a favor, 204 en contra y 46 abstenciones.
Eurodiputados de todo el espectro político reclamaron un mayor "papel de supervisión y control del Parlamento, en consonancia con la ampliación del papel de la UE en materia de Defensa". En la resolución de este miércoles, los eurodiputados instaban a los Estados miembros de la UE a aumentar su gasto en Defensa hasta al menos el 3% del PIB, a apoyar la creación de un banco para la defensa, la seguridad y la resiliencia, y a explorar un sistema de bonos europeos de defensa para prefinanciar grandes inversiones militares, entre otras medidas.
Sin embargo, la resolución acordada por el Parlamento no incluía ninguna censura específica al uso del artículo 122, a pesar de que algunos eurodiputados habían intentado presentar una enmienda de este tipo. Varios legisladores de los grupos de La Izquierda y Los Verdes/Alianza Libre Europea propusieron incluir el siguiente considerando: "El Parlamento lamenta la elección de utilizar el artículo 122 para el nuevo instrumento de la UE destinado a apoyar las prestaciones de Defensa de los Estados miembros y expresa su profunda preocupación por haber sido excluido del proceso de decisión".
Sin embargo, la enmienda fue rechazada con 444 votos en contra. Entre ellos, casi todos los de los grupos del PPE, Socialistas y Demócratas (S&D), Renovar Europa y Conservadores y Reformistas Europeos (ECR). "Preferiríamos participar más en la elaboración de este plan, pero no es una batalla importante para nosotros", declaró a 'Euronews' el copresidente del ECR, Nicola Procaccini, para explicar la decisión de su grupo.
El eurodiputado estonio Riho Terras, vicepresidente de la comisión de Seguridad y Defensa del PPE, cree que se trata de un asunto en el que el tiempo apremia y que la UE debería centrarse en obtener resultados, más que en el proceso en sí. "Nosotros (la de Seguridad y Defensa del PPE) no nos sentimos marginados mientras haya supervisión y transparencia en el uso de los fondos que la Comisión Europea presta a los Estados miembros", señaló Terras a 'Euronews'.