El viejo sueño de la humanidad es conseguir una fórmula milagrosa para luchar contra el envejecimiento. Aunque la victoria total aún no se ha alcanzado, sí existe la posibilidad de reavivar obras de arte inmortales.
En Florencia, los restauradores ya utilizan nuevos métodos para que las viejas obras de arte recuperen vida.
Con el tiempo, las pinturas se deterioran. Su estructura se vuelve frágil, y esto es debido a la degradación del carbonato de calcio, un componente vital en numerosas obras de arte. Los científicos tratan de revertir este envejecimiento con nanopartículas de hidróxido de calcio.
“Este cuadro está muy dañado debido a su antigûedad y a que fue retirado de la pared con apenas unas capas finas de pintura, que en lado izquierdo se han desvanecido. Ahora con este “nanocalcium” podemos consolidar la fragilidad del color”, asegura Fabrizio Bandini, restaurador.
Varios científicos europeos han aunado sus esfuerzos en este proyecto de investigación. Una simple reacción química produce nanopartículas de hidróxido de calcio capaz de penetrar en el interior de las obras de arte y restaurar su estructura.
“Restauramos exactamente la misma composición que hay en el interior de la pintura, el mismo material que fue utilizado por el artista al crearla “, aclara Piero Baglioni, químico de la Universidad de Florencia y coordinador del proyecto NANOFORART
Al sintonizar el tamaño de las nanopartículas, los científicos controlan las propiedades químicas del líquido restaurador, adaptándolo a la obra de arte en cuestión.
La nanotecnología también sirve para limpiar los cuadros, incluso las tan delicadas acuarelas. Este gel elimina suavemente el polvo de la obra de arte sin dañar la pintura.
“En este gel, la cantidad de agua es limitada. Mediante la química del gel y el tamaño de sus poros, podemos controlar el nivel de penetración de agua que queremos en el interior de la pintura: 100 micras, 200, etc.” explica Piero Baglioni.
En el taller de restauración, este gel de limpieza se utiliza hasta en las piezas más frágiles, como este textil bizantino del siglo XIII con bordados de oro.
“Creo que este es el futuro para este tipo de intervenciones, ya que es una de las formas menos invasivas en el tratamiento de una obra de arte “, opina Susanna Conti, restauradora de textiles.
Los científicos esperan que los nanomateriales brinden a los restauradores un conjunto de herramientas y métodos sin precedentes a un costo insignificante
Para Piero: “Con la nano-ciencia aplicada a la restauración de arte, podemos crear una nueva metodología que retrase la muerte de nuestras obras de arte. Podemos ayudar al arte a que sobreviva futuras generaciones, ofrecer una especie de immortalty genuina para estas obras de arte inmortales , conservarlas para nuestros hijos y los hijos de nuestros hijos.”