En un futuro no muy lejano podríamos ver una mano robótica cogiendo fruta en un supermercado automatizado.
En un futuro no muy lejano podríamos ver una mano robótica cogiendo fruta en un supermercado automatizado.
Estas novedosas manos han sido diseñadas con materiales flexibles para que no dañen los productos que recogen, como fruta o verduras, por ejemplo.
En su desarrollo han participado varias universidades europeas además de Ocado, el mayor supermercado en línea del Reino Unido.
Ocado también ha empezado a trabajar en los supermercados automatizados, como en Hatfield, a unos kilómetros al norte de Londres.
“En este almacén probamos cientos de algoritmos y diferentes máquinas. Aquí unos 8 000 contenedores se mueven al mismo tiempo. Es como controlar el tráfico en el centro de una gran ciudad. El sistema es complejo, se trabaja con muchos datos y con sensores. Si una sola pieza deja de funcionar, tenemos que analizar el problema e intentarlo de otra manera”, explica Paul Clarke, de Ocado.
Según un estudio reciente de la Universidad de Oxford, hasta el 40% de los puestos de trabajo que conocemos hoy podrían desaparecer en las próximas décadas ya que serían realizados por robots.
“Los humanos son capaces de reaccionar ante un problema imprevisto, ante un desafío. Tienen iniciativa. La calidad de su trabajo es excepcional en comparación con la de los robots. Algunos sistemas robóticos podrían ser ya una realidad pero todavía hay muchos detalles en desarrollo como el control de calidad, los daños que pueden provocar y los residuos. Como digo, quedan todavía muchos desafíos que superar”, asegura Alex Harvey, de Ocado.
El objetivo de los investigadores es diseñar manos robóticas que puedan llegar a tratar en los supermercados automatizados hasta 46 000 productos al día.