ZURICH, 25 ago - Credit Suisse ha pedido a todo el personal no vacunado en Estados Unidos que trabaje desde casa a partir del 7 de septiembre, al tiempo que retrasa sus planes de regreso a la oficina por la preocupación que suscita la propagación de la variante delta de COVID-19.
La vuelta completa a la oficina ha sido aplazada hasta el 18 de octubre, según comunicó el segundo mayor banco de Suiza a sus empleados estadounidenses la semana pasada, mientras que a aquellos que no se han vacunado contra la COVID-19 se les ha dicho que se queden en casa hasta que reciban la vacuna o nuevas orientaciones.
"A medida que aumenta la preocupación en todo el país con respecto a la variante delta, seguimos recomendando encarecidamente a todo el personal que se vacune contra la COVID-19 y se mantenga informado de las últimas actualizaciones de los requisitos de uso de mascarilla y distanciamiento físico en su zona", dijo el banco a los empleados estadounidenses en una nota vista por Reuters y confirmado por la empresa.
"Esto es especialmente importante dada la mayor tasa de contagio de la variante delta", decía.
La noticia fue publicada el miércoles por Bloomberg.
La propagación de la variante delta ha hecho que algunas empresas de Wall Street se replanteen sus planes de vuelta a la oficina, mientras que los bancos estadounidenses han comenzado a aplicar requisitos más estrictos de uso de mascarillas y vacunas para el personal, al tiempo que tratan de evitar un feroz debate nacional sobre los derechos de los individuos.
El nuevo mandato de vacunación de Credit Suisse lo pone en consonancia con Goldman Sachs, Morgan Stanley y Citigroup, que también han hecho obligatoria la vacunación de los empleados para entrar en las oficinas en Estados Unidos.